Por: Neftalí Martínez Alzate – “El Filósofo del Fútbol”
Sí. ¡Así como suena! Y como diría “Cantinflas”: “No es blanco ni negro sino todo lo contrario”. Desde que los “eruditos pseudocientíficos” empezaron a priorizar la talla, el biotipo y la potencia de los futbolistas, como insumos imprescindibles del nuevo requerimiento táctico implantado en el fútbol colombiano, desde entonces empezó a inocularse de un entrenador a otro, el racismo que hoy existe en nuestro medio futbolístico; un “racismo” que nada tiene que ver con aquel prohibido por la FIFA y que tiene distintas connotaciones. El racismo al que me refiero, es a favor de los jugadores negros, y en contra de la generosa gama multiétnica que tenemos en Colombia, y que está siendo discriminada desde hace 12 años sin que se haya hecho una seria observación al respecto ni una contundente crítica sobre este hecho tan arbitrario.
La raza negra constituye el 10,6% del global de nuestra población, lo que la ubica como el tercer grupo racial del país, por debajo de los mestizos que constituyen un 58%, y de los blancos que constituyen un 20% del índice poblacional de Colombia. Así las cosas, no entiendo por qué las “lumbreras”de entrenadores que tenemos en nuestro medio, están privilegiando a jugadores de color, simplemente porque tienen “lomo” o porque físicamente cumplen supuestamente, con todos los requisitos para ser tenidos en cuenta en los equipos, aunque “pasen de agáchese” en lo que respecta a la dudosa condición técnica de un buen número de ellos.
Es que ni Brasil con el mayor índice de negros de América Latina, y con el segundo mayor índice de negros en el mundo, ha privilegiado tanto a los jugadores de color en sus clubes y en sus selecciones nacionales como sí lo hacemos aquí. ¿Y saben por qué no lo hace? Porque Brasil es el país con más alto mestizaje del mundo, y ni tontos que fueran ellos para no sacarle provecho a esa generosa gama racial y multiétnica que tienen.
¿Cuándo Ecuador podrá volver a sacar a un jugador medianamente parecido a Alex Aguinaga, si ha copiado de nosotros el absurdo adefesio de privilegiar sólo a los jugadores de color en sus clubes y selecciones nacionales? Si todo se redujera a la buena condición técnica de los jugadores, no importaría en absoluto a qué grupo racial pertenecen, y eso lo demostró el seleccionado de Francia en el Mundial del ’98, saliendo campeón con un altísimo porcentaje de jugadores negros en las filas de su combinado.
El problema es cuando por encima de la Condición Técnica privilegian caprichosamente talla,biotipo y potencia, en detrimento del talento de los jugadores de otros grupos raciales, que sí tienen las condiciones técnicas para ser tenidos en cuenta tanto en los clubes como en las selecciones nacionales. Es inconcebible que en un país como Colombia que está entre los 4 países más multiétnicos del continente, exista tanto racismo en su fútbol a favor de los jugadores negros cuya condición técnica en la mayoría de los casos, deja mucho que desear.
La manera más inteligente de sacarle el mayor provecho posible a esa riqueza multicultural que tenemos en Colombia, es permitiéndole a jugadores de diversas características técnicas e idiosincrásicas, tener la oportunidad de participar en los clubes y en las selecciones nacionales, como verdaderos agentes de cambio y posibles optimizadores de nuestro fútbol.
eso si es verdad,sin ser racista pero porque carajos se tiene que meter tanto negro al futbol colombiano en la selecciones de menores,mayores y clubes sabiendo que en colombia tambien hay blancos,mestizos e incluso indigenas que juegan bien al futbol. ojalas las directivas del futbol piense en ello y no se limite a solo contratar jugadores negros. lo que digo es que en el futbol colombiano tiene que haber igualdad para todos los saben jugar futbol sin impotar la raza,la religion o la condicion social lo que importa es que jueguen bien y ya.
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